Las Series de TV Norteamericanas golpeadas por la Crisis

2 tópicos han sido protagonistas titulares de las pesadillas de nuestras vidas; el Día del Juicio Final, que se maneja religiosamente a través de pitonisos alucinados, profecías manipuladas y rumores sin bases sólidas supuestamente detectados en la historia de la humanidad, pero con la fría y sagaz capacidad de moverle el tapete hasta a los incrédulos y difíciles de convencer, aunque de tanto abuso cinematográfico y literario light se ha convertido en una especie de Leyenda Urbana Global, como para asustarnos cada 5 o 10 años. El otro es la crisis, la nuestra, la de otros y en los últimos tiempos la de todos, esa palabra que hemos venido escuchando desde niños y que parece haber llegado para quedarse y que tal vez nunca veremos que se diluya completamente ¿Por qué? Pues simplemente porque es parte del “modus vivendi” de políticos corruptos, empresarios tranzas, empresas acomodaticias y seres humanos de baja calaña como por ejemplo el Clan Bush, dedicado a crear escuadrones de especuladores que volatilizan la vida diaria a su antojo en contubernio con empresas petroleras, farmacéuticas, fabricantes de armas, etc. Y que se dedican al siniestro deporte de derrocar “tiranos” para despelucarlos a su antojo, hasta el último centavo, en aras de una supuesta paz mundial y para bien de los pueblos oprimidos. Toing!!! ver para creer, hasta parece guion de Woody Allen.

Entrando en la materia televisiva, la caimanesca crisis actual ha empezado a golpear los presupuestos de series que parecían destinadas más al éxito total que a una corta existencia en la pantalla chica. Nada que ver con los tiempos gloriosos de la tv, cuando nadie imaginaba que algún día podríamos aspirar a tener una videocasetera en casa, o comprar las series completas para verlas una y otra vez. En aquellos tiempos las series tenían un horario fijo, no se repetían y el rating mandaba, porque millones de seres humanos se reunían frente a la caja mágica para ver “I Love Lucy” con Lucille Ball, “Ruta 66” con George Maharis y Martin Milner, “El Super Agente 86” con Don Adams y la supersexy Barbara Feldon. “Ladrón sin Destino” con Robert Wagner, “Misión Imposible” con Peter Graves y Martin Landau, “Los Locos Adams” con John Astin, la inolvidable Carolyn Jones y Jackie Coogan. “La Familia Monster” con Fred Gwynne, Yvonne de Carlo y Al Lewis, “Hawaii 5-0” con Jack Lord o “Kojak” con Telly Savallas por nombrar algunas, que duraron lo que tenían que durar, gracias a su público cautivo, que a los “ires y venires” de la tan mentada crisis a la que tanto aborrecemos.

Hoy en día, cada vez más, coincidiendo con el bache financiero en los USA, programas de televisión sufren recortes y cancelaciones. Ante la falta de presupuesto, las cadenas deciden hacer minitemporadas para darles un final “digno”. La noticia sorprendió a los fans: Por ejemplo, “Men of a Certain Age” no tendrá una tercera temporada. La serie, que ha sido aclamada por la crítica, fue cancelada lamentablemente por la cadena de televisión TNT. Esta se suma a la de “Desperate Housewives”, “In plain Sight”, “Eureka” y la fantástica “Breaking Bad”, que fue la máxima ganadora de los premios Emmy en 2010 pero que ya fue anunciado que terminará en 2011 con una temporada de apenas 16 capítulos, la mitad de los que usualmente se graban, una lástima.

Esta nueva crisis de las series de televisión coincide con el reciente bache financiero en Estados Unidos en tiempos de Obama. Y el caso de “Breaking Bad resulta especialmente paradigmático”. Porque la cuarta temporada tuvo una audiencia promedio de 2 millones 600 mil espectadores por cada uno de los 26 episodios. Sin embargo, para realizar una quinta temporada, Sony tuvo que negociar rebajas en los sueldos precisamente de los actores de BB, algo que resulta insólito. “Es una serie que con cada nueva temporada, se vuelve más cara”, explicó Joel Stillerman, vicepresidente ejecutivo de Sony. A pesar de las reducciones, el presupuesto simplemente no cuadraba. La televisora tuvo, entonces, que buscar socios. Inventó un modelo negocio en el que otras cadenas se convirtieron en pre-compradoras de la serie. Pagaban por adelantado un episodio que todavía no existía. Al final, Sony también tuvo que reducir a la mitad los capítulos de la última temporada para darle un “final digno” a la serie que ganó cuatro Emmys el año pasado. Increíble.

David Gilligan, creador de la serie lo tomó con humor: “Es una ironía divertida. Yo odiaría saber cuál será el último día de mi vida en la Tierra, pero estoy disfrutando el hecho de que sé cuál es el último día de Walter White (personaje protagonista de la serie)”. Al enterarse de la noticia de que el final sucedería pronto, Gilligan dijo: “Es un gran regalo para mí y los escritores. Nos permitirá construir un final satisfactorio para todos”:

Otro caso es el de “Desperate Housewives” que luego de casi una década de éxito, la ABC decidió darle fin. Todas las actrices querían llegar a una novena temporada por lo que el final las tomó por sorpresa pero según el presidente de ABC, la serie se volvió financieramente insostenible. Junto con las esposas, también se irán el próximo año los programas “Rescue Me” la del bombero ebrio en vías de recuperación (transmitido por FX) y la divertida serie de una estrella de Hollywood y sus festivos compinches que se llama “Entourage” (de HBO).

La crisis alcanzó incluso a una leyenda de la televisión estadounidense: “All My Children”, el drama de la ABC que dejará de transmitirse luego de 41 años al aire, sin mas drama. Marc Cherry, jefe del departamento creativo de la ABC, dijo en una reciente conferencia de prensa en Los Ángeles: “Estoy convencido de que es mejor darle un final digno a las series cuando todavía son viables financieramente. Quiero que la gente todavía esté interesada en ver el final, algo que tenga clase”.

En el caso de “In Plain Sight”, que fue la primera serie de acción policíaca en llevar a un mujer en el rol principal: Mary McCormack. Hasta hace un año, todo parecía marchar rumbo al éxito. La serie fue renovada por dos temporadas más debido a que cada año tenía un mayor nivel de audiencia, al grado de que la tercera temporada alcanzó el tope de los cinco millones de televidentes con su episodio final. Luego vio la crisis. La cadena USA Network dictaminó que era una serie demasiado cara y anuló el contrato de dos años. Para darle fin, planeó una minitemporada de sólo ocho episodios. La explicación de la cadena de televisión vino de Jeff Wachtel, co-presidente: “Les habíamos prometido una serie de calidad; así que también queremos que el público tenga un final congruente”. Gulp!!!

Finalmente Syfy ha decidido cancelar “Eureka” definitivamente, lo cual quiere decir que ni siquiera le concederán esa sexta temporada de seis episodios que se anunció como un final “digno” para la serie. La lista de cancelaciones, además, parece que crecerá si la crisis sigue. Aunque hay casos raros como “Two and a Half Men”, que tras la escandalosa salida del parrandero extremista Charlie Sheen, han contratado a Ashton Kuschner (ex “The 70´s Show” y marido de Demi Moore), al que le dieron de entrada un sueldazo que ya quisiera cualquier profesionista del mundo civilizado latino, un camerino de 2 pisos que es un tráiler de luxe que nada tiene que ver con los condominios de interés social en el que habitan muchos de los telespectadores del programa abajo del Río Bravo y además tiene tantos lujos; como por ejemplo 9 pantallas de plasma que le permiten ver quien toca a su puerta para ver si le conviene dejarla pasar. Simplemente la crisis que parece de todos, a algunos ni los razguña.