La Preocupación : Un Mal del Ser Humano

“Si algo tiene solución, para qué te preocupas y si no tiene solución para qué te preocupas, en lugar de preocuparte, mejor ocúpate…”

Todos en algún momento de nuestras vidas hemos sentido de alguna manera lo que es la preocupación. La preocupación es una alteración de nuestras emociones y una inclinación, en muchos casos producto del pensamiento negativo y obsesivo, que nos hace sufrir provocándonos tristeza y depresión.

En sí, ¿La preocupación qué es? ¿No es una forma mental de adelantar acontecimientos negativos y provocar la alteración de nuestras emociones? ¿No es una forma de dar atención sobre un asunto que nos ocupa antes de que sucedan los acontecimientos?

La palabra “preocupación”, es la ocupación previa al acontecimiento. En nuestra vida se convierte en sinónimo de sufrimiento e inestabilidad emocional, que nos impide vivir nuestra vida de manera plena

Cuando se presenta un problema o una crisis en nuestra vida, la amenaza de esto nos preocupa y nos llena de ansiedad, produciendo pensamientos que producen nuevas preocupaciones. Si tomamos el control y sabemos crear nuevos pensamientos positivos, lograremos disipar el estado de alerta.

Las preocupaciones afectan a todas las personas de un grado a otro. A lo largo de nuestra vida se presentan problemas, crisis, obstáculos, los cuáles ocupan nuestra mente de manera negativa y nos impiden tener paz.

El futuro se construye en el presente y sin embargo muchas veces estamos alerta por lo que pueda pasar, dejando de vivir nuestro momento más importante en nuestra vida, nuestro presente. ¿No es esto estar en el futuro? Nos preocupamos por situaciones que en la mayoría de los casos no se presentan.

La preocupación transforma nuestra conciencia en una conciencia obsesiva de nuestros fracasos y nuestras frustraciones, dejándolas que se apoderen de nosotros. Viviendo la vida de una manera negativa con ansiedad, generando inclusive enfermedades psicosomáticas tales como gastritis, colitis, dolor de cabeza, insomnio, entre otras.

La preocupación está sustentada en creencias. Creo que va a pasar esto, lo otro, lo de más allá. Ante estas circunstancias mentales es bueno adoptar una postura crítica hacia aquello que sustenta la preocupación. ¿Qué probabilidades existen para que aquello que me preocupa llegue a suceder?

La reiterada persistencia de pensamientos negativos aumenta su poder. Si desviamos la atención, poco a poco, perderemos el miedo y no tomaremos como verdaderos esos pensamientos que nos obsesionan; y así se aliviará nuestra preocupación.

No hay otro camino para la liberación humana, que el de las emociones positivas y la conciencia de la importancia que tiene el proceso mental. Es indudable que los seres humanos que se perciben por dentro y saben cuál es su contenido mental, adquieren dominio suficiente para liberarse de las preocupaciones.

Aunque las cosas marchen mal, no aumentemos a nuestra desesperación la difícil carga de estar más preocupados. Analicemos las causas, busquemos soluciones y todo se resolverá con más sabiduría.

Gracias a esta maravillosa revista tijuanense, por darme la oportunidad de estar con usted, amable lector mes con mes, saludos y hasta el próximo mes….

Por Psicóloga Elizabeth Montenegro H.

 

 

 

SALUD

Deja un comentario